Motor eléctrico bicicleta

Cada vez son más las personas que utilizan su bicicleta para ir al trabajo o moverse por la ciudad y campo, esto es debido a que es uno de los mejores medios de transporte sostenible. Las bicicletas eléctricas son respetuosas con el medio ambiente a la vez que favorecen al transporte de personas de un lado a otro de la ciudad de una forma mucho más saludable y dinámica.

Este transporte no contamina nada porque su motor eléctrico funciona mediante una batería. Las baterías suelen tener una vida útil de dos años y se recargan mediante electricidad. Normalmente, la autonomía de la que disponen este tipo de transportes es de unos 25 y 70 kilómetros, dependiendo del modelo y las funciones que tenga esa bicicleta.

Es interesante saber que el motor de la bicicleta eléctrica no se activa si la persona no pedalea, es decir, su labor es ayudar al pedaleo, pero no reemplazarlo. La batería suministra energía al motor, y esté, hace que el pedaleo sea mucho más sencillo. De esta forma, entendemos las bicicletas eléctricas como un medio de transporte sostenible a la vez que saludable.


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Para que el motor eléctrico se detenga automáticamente, el ciclista debe accionar el freno o llegar a una velocidad demasiado alta. Es en este momento, cuando el motor creerá que el ciclista ya no necesita su ayuda y dejará de pedalear de forma automatizada.

Dentro de los motores eléctricos para bicicletas podemos encontrar una gran variedad, que pueden variar en autonomía, velocidad, o incluso tiempo de carga. Dependiendo de las necesidades del ciclista o el uso que le vaya a dar deberá escoger un motor u otro. Si lo utilizará por montaña lo más probable es que necesite un motor mucho más potente que si únicamente necesita transportarse por la ciudad, aunque en este caso necesitará más autonomía.


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También se pueden diferenciar los motores eléctricos para bicicletas en dos tipos: con y sin escobillas. Aquellos que tienen escobillas son algo más económicos pero tienen una vida útil algo más corta, esto es debido a que las escobillas se emplean para alimentar las bobinas y se deterioran por el desgaste continuo.

Por otro lado, los motores eléctricos sin escobillas son más eficiente, con un mayor rendimiento y una vida útil bastante más larga. De esta forma, la mayoría de ciclistas demandan este tipo de motores a la hora de escoger uno eficiente y de calidad. Ya sean aquellos que van por la ciudad como los que buscan dar largos paseos por las montañas, en todo caso, la mejor opción es sin escobillas.

Un motor normal de bicicleta eléctrica dispone de varios electroimanes que giran por repulsión magnética dentro de unos imanes fijos. La polaridad de los imanes depende de unas placas conductores que están en contacto directo con las escobillas, en el caso que las haya, sino se compondrá de un controlador que determinará las polaridades. En ambos casos, la batería genera una energía que hace que los pedales se muevan, ayudando así al pedaleo del ciclista.